Si ayer anunciábamos que más productos entrarán en la vorágine de la falta de stock y aumentos de precio en 2021, ahora los ejecutivos y analistas de la industria del hardware dicen que el stock mundial de PC’s y ordenadores portátiles en 2020 se encuentra en niveles no vistos desde el debut del iPhone en 2007, sin mencionar que los fabricantes están todavía a meses de cumplir con los pedidos pendientes.
Para que nos hagamos una idea, en el 2008 se alcanzó un máximo de 300 millones de equipos de sobremesa/portátiles enviados. El mercado actual estaba en los 250 millones de envíos, y con motivo de la pandemia, donde se compraron muchos más equipos para el teletrabajo (estudios, juegos, etc), se incrementaron los envíos en un 15 por ciento para volver a situarse en los 300 millones de envíos al cierre de 2020, lo que ha cogido por sorpresa a una industria que tuvo que cerrar sus fábricas por motivos de la pandemia.
Según la empresa de investigación Canalys, habrán 1.770 millones de PCs y tablets en uso a finales de 2021, frente a los 1.640 millones de 2019. Para satisfacer la repentina demanda, el ya reducido número de fabricantes de ordenadores ha aumentado los pedidos de los proveedores, acelerado los envíos y preparado los modelos de nueva generación. Pero eso no es suficiente. El dinero adicional del estímulo gubernamental para escuelas y empresas en algunos países podría exacerbar la escasez hasta el año 2022, dijo Ryan Reith, vicepresidente de la firma de analistas IDC.
Estos equipos también incluirán muchas mejoras hasta ahora olvidadas dadas las nuevas necesidades, como la incorporación de mejores cámaras web de alta resolución, altavoces y micrófonos para videoconferencias, o la incorporación de chips móviles donde incluso existirían equipos con conectividad 4G o 5G pero sin acceso a las redes WiFi, aunque para ello tendrán que lidiar primero con algunos problemas, como la escasez de pantallas y procesadores para equipos portátiles.
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